El papa Francisco, teniendo en cuenta los retos pastorales de nuestros días, pidió a la Pontificia Comisión Bíblica que estudiara la concepción del hombre en la Sagrada Escritura, para ofrecer a los cristianos y al mundo entero un mensaje de luz y de esperanza, fruto de una exégesis actualizada de la Palabra revelada. Siguiendo el mandato del Papa, la Comisión Bíblica no se limita en este documento a dar respuesta a ciertas cuestiones antropológicas específicas, sino que ofrece una visión integral de la persona humana, de su dignidad, de sus relaciones y de su destino, de modo que en ese marco global los desafíos de nuestra cultura puedan encontrar su lugar adecuado.