¿Cuánto tiempo llevas sin hacerte un regalo? Pues no lo dudes, aquí te doy una pista. Migueli ha sacado su último disco, tras años de carretera, cargado de experiencias de acompañamiento, de abrazos más cariño y lo más importante, lleno de búsqueda y encuentros del Dios Amor. El Disco, su mejor disco, se titula “mucha agua y mucha sed”.
En estos momentos en los que muchos jóvenes se encuentran sedientos de sentido, Migueli es el mejor cantautor en esta frontera de diálogo entre fe y cultura, entre lo marginal y el anuncio de la Buena Nueva.
No es pretencioso afirmar que este disco suena tan acústico que se hermana a los conciertos en directo de Migueli, con frescura, con brillo, con madurez y lleno de esperanza. Está grabado en Costa Rica, Argentina y Madrid por músicos y productores que han dado lo mejor de sí: producido por el gran Fernando Polaino, Bernardo Quesada (productor de Rubén Blades) y Jonatan Narváez, talentoso productor argentino. Estéticamente viene acompañado por el diseño del sorprendente Antonio Sabán.
Migueli en este disco no sólo nos “regala su sombra”, sino su arte en esencia, su corazón compartido a raudales, su desbordante y contagiosa alegría. En esta obra de arte, Migueli se entrega sin condiciones.
